sábado, 6 de marzo de 2021

Calor de primavera

 Nada tan caliente como mi piel cuando te recuerdo e imagino la pasión con la que me miras y te muerdes el labio, reprimiendo tus ganas cuando aún están los amigos entre los dos.


Echar a andar mi mente coqueta es mi adicción, cerrar los ojos y casi puedo sentir tu respirar en mi nuca, tus besos en el cuello mientras tocas mi espalda.

Recordar es volver a vivir, pero ¡Con un demonio, ven ya! Sé un ángel que me haga pecar, al infierno le vamos a enseñar cómo se hace el fuego.

Las gotas de sudor en tu cuerpo candente, eres especial en la cama y contra la pared. 

Haces que despierte la perversidad y te pida aquí, ahora cerca mío, encima de mí; abajo de mí, o abrazados, cansados de tanto amar.

El calor de la primavera es poco, cuando tus piernas se entrelazan con las mías. 


Ahora soy yo la que se muerde los labios en deseo de verte otra vez, pero que más da si fue ayer o es hasta mañana. Lo quiero volver a repetir.

El calor de la primavera casi no es nada cuando juntos estamos en la misma cama.

Ven a mí, a seducirme con tus ojos pasionales, con tus manos ágiles desvistiendo mi cuerpo hambriento de tí...